2 de mayo de 2011

William Morris


Uno de los hobbies-manías que he ido desarrollando con la edad es comprarme libros, empezarlos y abandonarlos a la mitad, para volver a retomarlos meses o años después con verdaderas ansias y por fin, devorarlos de una atacada. Esto explica que pueda estar leyéndome a la vez una media de 10 libros, ¡ja!.
Esta vez ha querido el destino que retomara/acabara el libro de William Morris que reúne sus tres ensayos: Cómo vivimos y cómo podríamos vivir. Trabajo útil o esfuerzo inútil. El arte bajo la plutocracia*. Todo esto en los días en que celebramos el Día Internacional del Trabajador y Día del Movimiento Obrero Mundial. Humm, en cualquier caso ha sido muy que inspirador.

Portada del libro que reúne los 3 ensayos de William Morris.

Más que recordar la figura de Morris, lo que realmente me gustaría es formar un club de fans y sé de muchas que me seguirían en el empeño si no se me han adelantado ya. El caso es que casi siempre se le recuerda por su faceta artística y se tiende a pasar a segundo plano su carrera como pensador. Pues error, porque ambas facetas son la misma, es decir, la belleza de su obra no es más que el reflejo de un empeño por luchar contra la vulgaridad que comenzaba a fabricarse en masa. Su fin no era decorar, sino agitar la conciencia social (“El arte es largo y la vida breve. Hagamos algo, al menos, antes de morir").

William Morris (1834-1896).

Morris nació en una Inglaterra victoriana triunfante como 1ª potencial industrial del mundo pero tanta gloria aparente no pudo ocultar la miseria de una clase obrera que surgió en aquella época. Una nueva clase social hacinada y explotada en suburbios urbanos a la que precisamente el Reina Sofía dedica en este momento una exposición fotográfica, Una luz dura, sin compasión. El movimiento de la fotografía obrera (1926-1939), dónde se muestra la historia del documental fotográfico proletario amateur.

Cartel de presentación de la exposición fotográfica de "obligada visita" que organiza el Museo Reina Sofía (Madrid).

El odio por la sociedad moderna (cuya política capitalista se basa en el “sálvese quién pueda“) es lo que impulsó a Morris a proponer modos de vida alternativos. Son “sus exigencias en pro de una vida decente:
1-un cuerpo saludable,
2-una mente activa,
3-una ocupación apta para un cuerpo sano,
4- un mundo hermoso en el que vivir (...)”

En sus discursos clama por el goce de la vida y la justicia social, así como por la nobleza del trabajo humano (“el arte es la expresión del gozo del hombre en su trabajo”).

Grabado de William Morris.

En 1883 fundó la Federación Socialdemócrata y más tarde organizó la Liga Socialista, bajo la premisa de que "sólo tenemos un arma contra esa terrible organización de egoísmo que atacamos, y esa arma es la unión".

El rapto de Perséfone, Rosetti.

Casado con Jane Burden (1839 - 1914), a la que por cierto no hay que saltarse tampoco de vista. Mujer de clase obrera, se convirtió en modelo de artistas y máxima expresión de la belleza femenina para los Prerrafaelistas, movimiento al que Morris estuvo estrechamente vinculado por su rechazo a la producción industrial en las artes decorativas y la arquitectura, y la consecuente reivindicación a un retorno a la artesanía medieval (movimiento Arts and Crafts).


Para terminar, cito de nuevo a Morris en el Día Internacional del Trabajador:

"Hay dos clases de trabajo, uno bueno y otro malo. La diferencia es que uno contiene esperanza. El otro es un trabajo de esclavos, un mero vivir para esforzarse (...)".

Pues eso, ¿cuál crees que es el tuyo...?


*Todas las citas entre comilladas son estractos de los ensayos de William Morris que menciono en el texto.


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